Es un tipo de artritis que a menudo ocurre con psoriasis de la piel.
Artritis soriásica
La psoriasis es una afección cutánea crónica y común que produce parches rojos en el cuerpo. Alrededor de 1 de cada 20 personas con psoriasis desarrollará artritis con la afección cutánea. En la mayoría de los casos, la psoriasis se presenta antes que la artritis.
La causa de la artritis psoriásica se desconoce, pero los genes pueden estar involucrados.
La artritis puede ser leve y comprometer sólo unas cuantas articulaciones, particularmente aquellas al final de los dedos de las manos o de los pies.
En algunas personas, la enfermedad puede ser grave y afectar muchas articulaciones, incluida la columna vertebral. Cuando la columna vertebral resulta afectada, los síntomas son rigidez, ardor y dolor, con mayor frecuencia en la región lumbar y el sacro.
Las personas que también tienen artritis suelen presentar cambios en la piel y las uñas por la psoriasis. Con frecuencia, la piel empeora al mismo tiempo que la artritis.
Durante un examen físico, el médico buscará:
Se pueden tomar radiografías de la articulación.
El médico puede prescribir antinflamatorios no esteroides (AINES) para reducir el dolor y la inflamación de las articulaciones.
La artritis más grave requiere un tratamiento con fármacos más potentes llamados medicamentos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (DMARD, por sus siglas en inglés), tales como:
Nuevos medicamentos que bloquean una proteína inflamatoria, llamada factor de necrosis tumoral (FNT), se están convirtiendo en la opción de tratamiento para la artritis psoriásica. Estos medicamentos abarcan:
Algunas veces, se pueden inyectar medicamentos esteroides en las articulaciones muy dolorosas .
En casos excepcionales, los pacientes necesitan cirugía para reparar o reemplazar las articulaciones lesionadas.
El médico puede aconsejar una mezcla saludable de descanso y ejercicio. La fisioterapia puede ayudar a incrementar el movimiento de articulaciones específicas. También se puede utilizar la terapia de calor y frío.
La enfermedad a menudo es leve y afecta sólo unas pocas articulaciones. Unas pocas personas presentarán artritis psoriásica grave en las manos, los pies y la columna que ocasiona deformidades.
En las personas con artritis grave, el tratamiento aún puede aliviar el dolor y prevenir la destrucción de la articulación, especialmente si se inicia a tiempo.
Solicite una cita médica si se desarrollan síntomas de artritis junto con psoriasis.